¿sociedad de autores?
La SGAE vuelve a la carga —una vez más— con todo su aparato legal-incriminatorio. Los autores representados por esta sociedad y que se consideran a sí mismos la cultura son en realidad lo que podríamos denominar el apéndice del PSOE y por tanto gozan de unos privilegios que todo el entorno socialista disfruta y cuando gobierna brinda, incluídos medios de comunicación y subvenciones generosas. Les gusta abanderar el pacifismo y las libertades en general aunque a la hora de obrar actúan de manera muy diferente como el bloguero del que os voy a hablar bien sabe.
De los frutos de estos privilegios que mencioné arriba nació el famoso canon de la SGAE, canon éste abitrario e injusto, que encarece aún más el acceso a la cultura y que se ha transformado en una especie de impuesto obligatorio que tenemos que pagar todos aquellos que usemos ordenador, cámara de fotos, reproductor de mp3, reproductor de dvd y ahora —pretenden también— que lo paguemos por tener conexión a internet. Y sólo estoy citando unos pocos.
No es de extrañar entonces que muchos usando el derecho a la libertad de expresión se animen a criticarlos e incluso a algo más.
Pero con la SGAE hemos topado y con la SGAE no se juega, estos personajes representados por miembros ilustres de la televisión basura no acepta críticas y responde con burofaxes como este:
Y todo por decir que son unos ladrones. Pues sí, mira tú qué palabra tan grave. Imagino que la demanda, si es que ponen una, no prosperará —si lo hiciese sería tremendo— lo que no les perdona la actitud intimidatoria con la que siempre gustan actuar. ¡NO A LA SGAE! a ver si se enteran.
Noticia leída aquí y reflejada en el blog del autor aquí.
De los frutos de estos privilegios que mencioné arriba nació el famoso canon de la SGAE, canon éste abitrario e injusto, que encarece aún más el acceso a la cultura y que se ha transformado en una especie de impuesto obligatorio que tenemos que pagar todos aquellos que usemos ordenador, cámara de fotos, reproductor de mp3, reproductor de dvd y ahora —pretenden también— que lo paguemos por tener conexión a internet. Y sólo estoy citando unos pocos.
No es de extrañar entonces que muchos usando el derecho a la libertad de expresión se animen a criticarlos e incluso a algo más.
Pero con la SGAE hemos topado y con la SGAE no se juega, estos personajes representados por miembros ilustres de la televisión basura no acepta críticas y responde con burofaxes como este:
Y todo por decir que son unos ladrones. Pues sí, mira tú qué palabra tan grave. Imagino que la demanda, si es que ponen una, no prosperará —si lo hiciese sería tremendo— lo que no les perdona la actitud intimidatoria con la que siempre gustan actuar. ¡NO A LA SGAE! a ver si se enteran.
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